Nos conocimos chocando entre la niebla, y tu disculpa rompió el silencio en que vivía. Hoy, la niebla ha vuelto, pero el silencio que nos envuelve es tan espeso, que ni siquiera ella consigue penetrarlo.
-- o --
Me pediste que me quedara a tu lado, mas no pudiste evitar el vuelo de mi alma. Hoy, a tu lado sigue mi carcasa, tuya, vacía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario